D'AMOUR ET D'EAU FRAÎCHE
(De amor y de agua fresca)
DIR Isabelle Czajka
CON Anaïs Demoustier, Pio Marmaï, Laurent Poitrenaux, Jean-Louis Coullo'ch, Christine Brücher, Manuel Vallade, Adélaïde Leroux, Océane Mozas, Armoine Sanders, Stéphane Chivot, Mohammed Bouaoune, Julien Haurant, Alexandre Carrière.
PAÍS Francia
AÑO 2010
A My French Film Festival, descubierto gracias al Cine Club de la Alianza Francesa de Barranquilla, le debo la oportunidad de ver alguno de lo último y mejor del cine francés. Un cine que siempre da placer, te incita a querer saber más de cine, te predispone con sólo oír el acento a que te aportará algo a tu visión del mundo... es fascinante que me mueva sin haber visto aún una escena.
Este film, D'amour et d'eau fraîche, como leí en un comentario en mubi.com, es muy francés. Compila la sexualidad casi explícita, "sexo con extrangeros, cigarrillos, café oscuro, trabajo en agencias de arte", gente con vidas aparte, familias disfuncionales... una mezcla perfecta en la duración perfecta.
La temática del trabajo me movió. Rescato por ello estas frases para los que andamos atascados mentalmente con conseguir un empleo: "La clave es la sencillez, la naturalidad, ser uno mismo." "Nos gusta la rebeldía." "Hay que tomar la iniciativa". Eso, junto a aquella reflexión del saber, ya con un trabajo o en la ausencia y necesidad de éste, siempre se nos vienen a la mente todo lo que pudimos hacer y hubiera sido mejor, es una estupidez.
Retomando el amor y la pasión, nada más que decir extraído de la película que el saber que hay veces que si algo no nos gusta es mejor gritar mucho para olvidarle en seguida; o entender que si hay ausencia hasta los libros pueden recordarte que hay más delante; o el miedo por hacer cosas ya no solo sino con alguien que te importa; o que follar por la tarde pone triste, aunque sea con alguien de edad, que sí que lo haga bien; o que aunque duela es maravilloso haber tenido un gran amor; o inventar palabras como pizzalofía para ser chistosamente interesante; o llegar a un punto donde decir "No se a donde vamos, o que hacemos, pero es divertido.", te sacará una sonrisa eterna; o que habrán miradas pícaras cuando descubrimos algo sin importancia que nos ocultan; o muchas cosas más que no empiezan en drama ni terminan en comedia romántica, no... todo se siente y se vive.
Es envidiable el desarrollo de la película; una París despejada, viajes en coche hasta el sur por las autopistas llenas de campos, cascadas, casas rústicas, panes franceses... la música de Supermen Lovers o el punk de The Kills en los momentos justos... la sencillez y belleza de las mujeres francesas...
Finalmente antes de los fotogramas, y sin poder dejar de lado de nuevo las frases, esta pronunciada por Julie es la exacta copia de mis pensamientos sobre el mar: "Los días junto al mar son los mejores. ¿El mar nos alegra o la alegría nos lleva al mar?"
Este film, D'amour et d'eau fraîche, como leí en un comentario en mubi.com, es muy francés. Compila la sexualidad casi explícita, "sexo con extrangeros, cigarrillos, café oscuro, trabajo en agencias de arte", gente con vidas aparte, familias disfuncionales... una mezcla perfecta en la duración perfecta.
La temática del trabajo me movió. Rescato por ello estas frases para los que andamos atascados mentalmente con conseguir un empleo: "La clave es la sencillez, la naturalidad, ser uno mismo." "Nos gusta la rebeldía." "Hay que tomar la iniciativa". Eso, junto a aquella reflexión del saber, ya con un trabajo o en la ausencia y necesidad de éste, siempre se nos vienen a la mente todo lo que pudimos hacer y hubiera sido mejor, es una estupidez.
Retomando el amor y la pasión, nada más que decir extraído de la película que el saber que hay veces que si algo no nos gusta es mejor gritar mucho para olvidarle en seguida; o entender que si hay ausencia hasta los libros pueden recordarte que hay más delante; o el miedo por hacer cosas ya no solo sino con alguien que te importa; o que follar por la tarde pone triste, aunque sea con alguien de edad, que sí que lo haga bien; o que aunque duela es maravilloso haber tenido un gran amor; o inventar palabras como pizzalofía para ser chistosamente interesante; o llegar a un punto donde decir "No se a donde vamos, o que hacemos, pero es divertido.", te sacará una sonrisa eterna; o que habrán miradas pícaras cuando descubrimos algo sin importancia que nos ocultan; o muchas cosas más que no empiezan en drama ni terminan en comedia romántica, no... todo se siente y se vive.
Es envidiable el desarrollo de la película; una París despejada, viajes en coche hasta el sur por las autopistas llenas de campos, cascadas, casas rústicas, panes franceses... la música de Supermen Lovers o el punk de The Kills en los momentos justos... la sencillez y belleza de las mujeres francesas...
Finalmente antes de los fotogramas, y sin poder dejar de lado de nuevo las frases, esta pronunciada por Julie es la exacta copia de mis pensamientos sobre el mar: "Los días junto al mar son los mejores. ¿El mar nos alegra o la alegría nos lleva al mar?"
La muerte no es ninguna tontería. Las historias de amor no acaban nunca, cuando amas de verdad amas para siempre.
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